Abro mi estuche y cojo mi olvidado lápiz, ese lápiz de madera de ébano del que un día tantas historias nacieron, me siento frente a mi escritorio desordenado, busco inspiración en las paredes, en las sillas, en los objetos, pelusas y polvo que rodean este pequeño pero agradable dormitorio, mis ojos se mueven con la intención de encontrar algo que ni siquiera buscan, mis dedos nerviosos juegan con el viejo lápiz, mis pies bailan al son del swing que se escucha al fondo... pasan los minutos, las horas y nada soy capaz de escribir, respiro profundamente, me dispongo a salir con mi folio vacío, miro al suelo, oscuro y frío, ese suelo que me acompaña cada día, y de repente lo veo de otro modo. Nunca antes me había fijado en él, ya estaba ahí cuando me compré esta diminuta caja en la que vivo, tendrá su historia, pensé. Era un suelo liso y homogéneo, aunque bastante rayado, era oscuro, lóbrego, opaco, nocturno, misterioso... Calculé que había sido suelo durante más de cincuenta primaveras, más de cien me atrevería a decir. Una sensación de deseo por conocer las historias que se ocultaban bajo sus raídas baldosas de cerámica invadió todo mi ser. Allí mismo me tumbé y me evadí en un mundo de suposiciones intrigantes, hipótesis recónditas, ensoñaciones enigmáticas... en mi imaginación se recrearon cada una de las pisadas ahora ya disueltas en el pasado, cada uno de los besos difuminados en los recuerdos de gente que probablemente nunca más exista, volvieron a sonar las voces ahora ya apagadas, parecía estar viviéndolo...
De repente, la espontánea alarma de las siete estalló en un irritable sonido como hace cada mañana, me arrancó de tan profundo sueño y me devolvió a la realidad. Tardé largos segundos en asimilar que todo había sido un sueño, parecía tan real...
Es precioso, mucho por compartirlo!
ResponderEliminarMuchas gracias por pasarte por mi blog! Es un honor.
Agradecería que tú también me siguieras :)
Un beso^^
Gracias a ti por pasarte por aquí, me alegra que te haya gustado
EliminarYa te he seguido ;)
Un saludo!
Amé tu entrada, escribes realmente estupendo. :)
ResponderEliminarMuchísimas gracias, me alegra que te haya gustado! Un saludo :)
EliminarMe ha gustado mucho tu relato.. la verdad es que es una pena cuando el despertador suena y fastidia un sueño tan real..
ResponderEliminarPor cierto, me gustó mucho el cabecero ^^
un besooo
Sí que es una pena, pero quería reflejar esa sensación que todos hemos tenido más de una vez cuando cualquier sonido, en este caso la alarma, nos despierta y rompe la magia de un buen sueño..
ResponderEliminarMuchas gracias por pasarte! Me alegra que te haya gustado :)
Un saludo :)
¡Hola! ^^
ResponderEliminarAntes que nada, quería decirte que es la primera vez que entro en este blog y he de confesar que tienes un rinconcito muy agradable. Me ha gustado mucho descubrirlo, pasar por aquí y que suene la preciosa melodía del piano mientras leo tus bellas palabras. Yo también he tenido sueños así, preciosos, y odio que suene la alarma y rompa todo ese maravilloso mundo que se crea de manera inconsciente dentro de nuestras cabezas. Bueno, eso, que ha sido un placer pasarme por aquí. Te felicito, y espero venir de vez en cuando.
Un beso,
Windflower.
¡Hola!
ResponderEliminarMe alegra muchísimo que te haya gustado, pues tu blog es uno de mis favoritos y leer estas palabras es un honor para mi :)
Muchas gracias por pasarte por aquí. Por cierto, me encanta tu nombre "Windflower"
Un beso :)